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¡A 33 años de la tragedia!

Relatado por: Leoncio Castrejón Salgado

E ste miércoles próximo 19 de septiembre, se estarán cumpliendo 33 años de aquel sismo que sacudió al país con una intensidad de 8.1 en la escala de Richter. Que si bien hubo otros años atrás, el de este año jamás se olvidará. ¡¡Jamás!! A pesar de haber padecido también otros de reciente suceso, como el del año pasado. ¡Qué tan pronto han pasado ya, 33 años de aquel día trágico en que muchos, muchos, vivimos el terremoto de 1985! Hoy en este día, ¿Cómo olvidarlo?, ¿Cómo borrar de nuestra mente, un fenómeno que la naturaleza convirtió en tragedia para cientos y miles de mexicanos?, ¿Cómo olvidar aquél 19 de septiembre cuando el reloj marcaba apenas las 07:17:47 hrs, y que apenas nos disponíamos a iniciar nuestras actividades del día y de pronto, surgido de la nada, creímos que era el fin de nuestros días? Para muchos tan sólo con recordarlo, es evocar escenas que aún a pesar del paso de los años, se mantienen tan vivas y tan escalofriantes y traumáticas, como si hubiesen ocurrido tan sólo hace algunas horas.

¿Cómo olvidar la tragedia en que cientos de mexicanos perdieron la vida en cuestión de segundos, de minutos, de horas y de días bajo los edificios colapsados? Sin duda que pasarán todavía muchos años, y será muy difícil borrar de nuestra mente tragedias como las de aquel fatídico año.

¿Cómo olvidar quienes acostumbrábamos sintonizar el noticiero matutino "Hoy Mismo" de Televisa, que conducían Guillermo Ochoa y Lourdes Guerrero, y escuchábamos a esta última, anunciar que precisamente en esos momentos se registraba un temblor?; a lo que sus compañeros del panel, no daban crédito de lo que en ese momento pasaba. Más tarde nos enteramos que el edificio de Televisa, de seis pisos, se había colapsado, al igual que cientos de construcciones en la capital del país. De igual manera, cómo olvidar que a través de la XEW radio, Jacobo Zabludovsky describía, con una crudeza sin par, los horrores de la tragedia que personalmente presenciaba en su recorrido por las calles capitalinas.

De igual manera, cómo olvidar que horas después del terremoto, el entonces presidente Miguel de la Madrid Hurtado, de manera arrogante rechazaba la ayuda que ya se ofrecía por la comunidad internacional ante la desgracia ocurrida. Sin embargo, al ver que los acontecimientos sobrepasaban las capacidades de auxilio del gobierno federal, éste, decidió aceptar la ayuda humanitaria.

El recuento de daños materiales fue cuantioso; cientos de vidas perdidas, desaparecidos, y los heridos para esos momentos eran ya miles. Para esos momentos los ciudadanos estaban temerosos, inquietos y habidos de saber con certeza lo que había pasado exactamente; ¡El Hospital Juárez, el edificio de departamentos de Tlatelolco "Nuevo León", el Centro Médico Nacional, una fábrica de costura ubicada en San Antonio Abad en pleno centro, el lujosos hotel “Regis" habían quedado reducidos a escombros! Permítame señalar tan sólo algunas de las causas del sismo: en primer término, nuestro país es uno de los lugares con mayor actividad sísmica, registrándose más de 90 sismos por año con una magnitud superior a cuatro grados en la escala de Richter. Y nuestro estado, se encuentra en la repartición geopolítica con mayor riesgo sísmico, al igual que Oaxaca, Michoacán, Puebla, Colima, Jalisco y sin faltar el DF- hoy Ciudad de México. Otros elementos a considerar son de tipo técnico: los edificios colapsados presentaban estructuras inadecuadas para terrenos arcillosos. No olvidemos que la capital se edificó en terrenos que antes de la Colonia eran Islotes y Lagos.

En términos políticos y administrativos, la corrupción y la mala planeación prevalecían en el ámbito Federal y en el entonces Departamento del Distrito Federal (DDF), ya que los edificios colapsados eran de reciente construcción. Por el contrario, estructuras más antiguas y adecuadas al terreno arcilloso, soportaron el movimiento telúrico como es el caso de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México que se encuentra en pie desde la antigua Colonia española.

A 33 años de la tragedia, es conveniente reflexionar sobre aquellos sucesos, pero también es conveniente plantear interrogantes: ¿El estado mexicano después del sismo, ha creado las condiciones de concientización e infraestructura para prevenir otras eventualidades con características similares o peores que las del 85? Lo anterior se lo comento porque no olvidemos, que en Petatlán, Costa Grande, Guerrero, hay una brecha sísmica parecida a la de Michoacán que provocó el sismo de 19 de septiembre del 85. Se tiene la hipótesis de que en la brecha sísmica de Petatlán en los últimos 80 años debió acumularse ya, suficiente energía elástica capaz de causar un sismo de consecuencias. Que de romperse en un solo sismo, éste podría ser de magnitud similar al del 85. Desafortunadamente se desconoce cuándo ocurrirá tal fenómeno. Mientras tanto? ¡¡ Que tenga usted, un excelente fin de semana!!