Santiago López Pérez, tío de Isidro Baldenegro, recogió del piso a su sobrino cuando recibió los balazos que impactaron en su pecho, abdomen y pierna derecha. Recuerda que la persona que mató a su sobrino es esposo de su nieta y padre de sus bisnietos.
Foto: Luis Cortés
Trinidad es el hermano menor de Isidro. Atrás de él, está la casa de su tío Santiago compuesta por una cocina (derecha), un corral donde hay gallinas y el cuarto principal (izquierda). El día del homicidio, el asesino esperó en la cocina.
Foto: Luis Cortés
Santiago contempla con viuda y su hermana el lugar donde encontró a Isidro.
Santiago contempla junto con la viuda Aurelia y con la madre de Isidro el lugar donde encontró a su familiar.
Foto: Luis Cortés
Margarita López es madre de Isidro. Dice que sus hijos de niños tenían ganas y eran felices. “Sólo jugaban. A veces corría bola”.Su mano izquierda detiene algunas fotografías de sus familiares, la que está en medio es Isidro. No recuerda tener muchas fotos más de sus hijos.
Foto: Luis Cortés
Santiago muestra donde estuvo su sobrino después de recibir los balazos. Estuvo recostado sobre la tarima de madera desde las cinco de la tarde del domingo, cuando fue el ataque, hasta que la policía llegó a Coloradas el martes. Su tío calcula que murió entre las 12 y las tres de la mañana del lunes 16 de enero. Su hermano mayor, Francisco, llegó entre esas horas intentando llevárselo al hospital más cercano, entre seis y ocho horas de distancia pero ya era muy tarde. Ya no reaccionaba.
Foto: Luis Cortés
Santiago es testigo de la resistencia contra la tala del bosque por dos generaciones Baldenegro. La del padre, Julio Baldenegro Prieto, asesinado a tiros en 1986 y ahora la de Isidro. Desde la muerte de su sobrino hay un grupo de ocho policías armados en la zona, cosa rara ver a los policías.
Foto: Luis Cortés
Margarita López dice que antes Coloradas de la Virgen era un lugar bonito pero ahora matan seguido. Recuerda que en el último año mataron a seis o cinco. Antes hacían fiestas en semana santa. “Ahorita ya no se anima la gente, tienen miedo. Tienen como dos años que no se animan. No hacen fiestas como hacía antes, antes era muy bonito aquí pero ahora ya no. Han matado mucho aquí y por eso no se arrima gente.”
Foto: Luis Cortés
Coloradas de la Virgen es una comunidad indígena de hecho ( no cuenta con título o resolución presidencial que le haya reconocido su territorio ancestral) está ubicada en el municipio Guadalupe y Calvo, Chihuahua. Se compone por más de 30 ranchos, rancherías y parajes dentro de una superficie aproximada de más de 49,000-00-00 hectáreas. Explican que antes había como 30 casas pero ahora, por la violencia, quedan como 10 habitadas.
Foto: Luis Cortés
En 2007, la comunidad indígena presentó demanda de nulidad de los permisos de los aprovechamiento forestal (expediente 374/2009 TUA 5) que SEMARNAT había autorizado al ejido Coloradas sobre el territorio en posesión de la comunidad. Después de 10 años, el proceso continúa sin resolver en el Segundo Tribunal Colegiado en materia administrativa en Chihuahua.
Foto: Luis Cortés
Aurelia conoció a Isidro cuando llevaba pocos meses de salir de prisión en Chihuahua, Chihuahua. Semanas después de conocerse, Isidro fue a San Francisco, California a recoger el prestigiado premio Goldman, también conocido como el Nobel verde, tras su defensa del bosque en la Sierra Tarahumara. Sólo dos ganadores de este premio han sido asesinados, Isidro en 2017 y Berta Cáceres en 2016, Honduras.
Foto: Luis Cortés
Aurelia visita la tumba de Isidro Baldenegro después de 15 días de haberla visitado. Cubierta por piedras y tierra, se alcanza a ver sobre los demás sepulcros. Es la primera frente al panteón que tiene uso desde principios del siglo pasado. Ahí, cuatro días después de su muerte, fue enterrado frente a 100 personas.
Foto: Luis Cortés
Desde la muerte de Isidro Baldenegro, hay ocho policías ministeriales en Coloradas de la Virgen. Enclaustrados en la punta de la montaña para tener señal en la radio por si algo llegara a suceder. Esta no es una postal habitual en las comunidades serranas. La estación de policía más cercana está en Baborigame, a tres horas de distancia en auto. Ahí también hay un cuartel militar con helicóptero pero opera en la destrucción de plantíos de amapola en el municipio.
