Operan principalmente durante la noche en colonias como; Condesa, Roma, Narvarte, Santa Fe y Polanco; “cazan” a jóvenes que salen de los antros de moda
Pueden utilizar indistintamente taxis de sitio, de aplicaciones o de calle. Sólo son choferes, ni uno dueño de las unidades lo que ha complicado a las autoridades de investigación su ubicación.
Siempre tienen un trato amable con las víctimas, dentro de la unidad les ponen música de su agrado, les ofrecen agua para hacerlas sentir en confianza para luego atacar.
El 80% de las violaciones se cometen en calles de la alcaldía Álvaro Obregón, la falta de vigilancia, poca iluminación y callejones son propicios para la comisión de ese delito.
Una vez que abusan de las mujeres, regresan a laborar tranquilamente. Uno de los violadores seriales cometió tres abusos en una sola noche.
Mujeres de entre 19 a 28 años de edad que salen de los antros de entre las 12:00 a las 3:00 horas los fines de semana sobre todo sábados.
Abordan los taxis porque estos “merodean” los antros de moda y otros donde saben que pueden encontrar a mujeres que pedirán sus servicios.
Dentro de las unidades las amagan con armas de fuego, las despojan de sus pertenencias para luego dirigirse a calles de la Álvaro Obregón.
A las víctimas las obligan a bajar la mirada durante el tiempo que están dentro del taxi, y no alcanzan a ver los números económicos de las unidades por lo que aportan pocos datos para identificarlos.
Sin embrago el trabajo de la PDI y la colaboración y participación de las jóvenes ha sido clave para imputar a los cuatro violadores seriales.
