Dos de las siete personas arrestadas el 14 de noviembre fueron retenidas bajo cargos de terrorismo. Mohammad Abdeslam, hermano de Salah (prófugo) y Brahim (muerto), figura entre los cinco liberados tras un interrogatorio preliminar. Gran parte de la atención se centraba en Molenbeek, un distrito pobre de Bruselas donde residen muchos inmigrantes musulmanes.