Son enfermedades causadas por el sistema inmunitario que ataca las células del propio organismo en vez de defenderlo. Las causas son desconocidas, pero se piensa que tienen un componente genético. Las zonas del cuerpo más afectadas suelen ser: vasos sanguíneos, tejido conectivo, articulaciones, músculos, piel, glóbulos rojos y glándulas endocrinas, como tiroides y páncreas.