Radiografía de un asteroide


Cuando empezó a evolucionar el Sistema Solar se formaron millones de cuerpos de silicatos y metales. Con centenas de kilómetros de diámetro, los que se formaron en la región interior a Marte se fusionaron dando lugar a los planetas terrestres, pero los de más allá del Planeta Rojo no pudieron conformar otro planeta. La cercanía de Júpiter modificó sus órbitas y aumentó su velocidad, así que empezaron a chocar fragmentándose y dando origen a los asteroides.

Su origen

Los asteroides se diferencian de los planetas no sólo por ser de menor tamaño, sino también por sus formas. Mientras estos últimos se caracterizan por ser esféricos, debido a su gran masa, los asteroides cuentan con una gran diversidad de formas. Una de las más peculiares es la del asteroide 2015 TB145, que pasó cerca de la Tierra hace tres años y que regresará a finales de este año con una forma similar a la de un cráneo humano, que en realidad podría ser un cometa extinto que ha perdido sus compuestos volátiles tras numerosos viajes alrededor del Sol.

Para todos los gustos

El 4 de febrero el asteroide 2002 AJ129 tendrá su máximo acercamiento a la Tierra, pero aún hay muchas más posibilidades de estudiarlos durante este año. Hayabusa2 es la misión de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) que pretende llegar en junio-julio de este año a un asteroide de 870 metros de ancho llamado Ryugu 1999 JU3. Se trata de un asteroide de tipo C, una categoría con los cuerpos celestes con más material orgánico. Los científicos esperan entender mejor cómo evolucionó el Sistema Solar estudiando muestras de sus materiales.

El 2018 abraza a los asteroides