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UBER Impecable por dentro y por fuera

"Buena tarde, mi nombre es Israel Ortega y me toca atenderlo", dice el chofer de Uber quien se distingue del resto de los taxistas. Usa traje, corbata, loción y te abre la puerta del automóvil 2014 que conduce.
"La primera ruta que me indica el GPS está bien o buscamos una alterna", pregunta Israel, ingeniero de profesión que debido a un recorte en la empresa tuvo que buscar un nuevo empleo. Dice que Uber es lo mejor que le ha pasado, le pagan cada semana y recibe hasta 30% de las ganancias (más de tres mil pesos).
El chofer de Uber, antes de prestar sus servicios a la aplicación, es sometido a un riguroso examen de conducción, se le solicita antidoping de manera constante así como antecedentes penales a nivel federal; después de este primer filtro son capacitados para dar un buen servicio.

TAXI Ruleteadas versátiles

Alfredo Tovar García enciende su auto y al mismo tiempo se escuchan los boleros de Los Tecolines, uno de los tantos discos pirata que le acompañan todos los días en la ruleteada.

Desde hace 48 años trabaja como taxista, labor que le permite mantener a su esposa y con la que logró sacar adelante a sus cuatro hijos, quienes ya le siguen sus pasos.

Alfredo maneja, un Dodge Attitude 2004, porta placas específicas de taxi, pero incumple con la cromáticia oficial guinda y oro.
Adornó el interior con un diamante de bisutería, dice que es "para atraer el amor y la fortuna", aunque asegura que le cayó la mala suerte cuando se casó.

CABIFY Los horarios de oficina no le acomodaban

Diana Rodríguez está por cumplir un año de trabajo en Cabify pues ingresó en octubre de 2014 asegura sentirse feliz porque puede manejar su tiempo, atender a su familia y aportar para el ingreso familiar. "En un día normal, me levanto a las 5 de la mañana, desayunamos y llevo a los niños a la escuela, si no tengo nada urgente qué hacer pues me conecto a Cabify hasta las 2 de la tarde cuando voy por ellos, los llevo al entrenamiento y les doy de comer. Ya como a las 6 o 7 de la noche me vuelvo a conectar y trabajo hasta las 12 o una de la madrugada, ese es mi horario", detalla Diana.
Como operadora de Cabify asegura que nunca ha tenido malas experiencias como cuando manejó un taxi libre, trabajo en el que duró dos semanas porque el auto que le rentaban se descompuso. En ese periodo decidio comprar un carro y en el intermedio se encontró con la empresa española.