Una Niña sigilosa


El fenómeno climático conocido como La Niña está inserto en un ciclo natural conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS). Es un proceso global que tiene dos extremos y que a grosso modo puede ser descrito con una fase cálida, conocida como El Niño; y una fase fría, conocida como La Niña. Después de pasar por un fenómeno neutro de transición entre estos dos ciclos, actualmente estamos en la etapa de La Niña.

ENOS

Cuando se presentan patrones de variaciones en la circulación atmosférica y oceánica en la región ecuatorial se percibe una disminución de los vientos alisios y calentamientos anormales en la temperatura de la superficie del mar lo que da origen al fenómeno conocido como El Niño. Posteriormente ocurre lo contrario: los vientos se vuelven más intensos y eso favorece que las aguas del mar sean más frías de lo normal.

¿En qué consisten?

Estas condiciones persisten sobre las regiones tropicales por varios meses y causan cambios notables en las temperaturas globales y en los regímenes de lluvias a nivel global. Este año la ONU ha alertado que el fenómeno climático de La Niña podría afectar a varios países, por lo que el sistema humanitario busca anticipar con la preparación de sistemas de respuesta en previsión de episodios dañinos para diferentes sectores como el agrícola.

La antesala de probables sequías