Se ha considerado que las matemáticas, como ciencia, surgieron con el fin de hacer cálculos comerciales y arquitectónicos, así como predecir acontecimientos astronómicos. Los babilonios se adelantaron más de mil años a los griegos en la invención de la trigonometría. El arqueólogo que inspiró el personaje de Indiana Jones, Edgar Banks, descubrió hace un siglo en Irak una enigmática tablilla babilónica de hace 3800 años, la más antigua conocida hasta la fecha, que enseña cómo hacer cálculos trigonométricos sin ángulos y con una precisión sin precedentes.