El propósito de la sonda es expandir nuestro conocimiento del Sol al realizar acciones como la medición de los campos magnéticos y eléctricos. Los hallazgos de la misión ayudarán a los investigadores a mejorar sus pronósticos de eventos meteorológicos espaciales que tienen el potencial de colapsar las comunicaciones en la Tierra y dañar a los astronautas en órbita.

El estudio de los componentes del viento solar y sus efectos sobre la atmósfera solar son uno de los principales retos científicos.El viento solar es un laboratorio natural para estudiar plasmas espaciales, que es el estado en que se encuentra el 99% de la materia en el Universo. Es así que al estudiar fenómenos que ocurren en el viento solar, también se puede conocer más sobre procesos que ocurren en otros entornos astrofísicos, como sistemas planetarios distantes.

Los instrumentos de la sonda Parker podrán detectar detalles que no es posible avistar desde más lejos. Al tomar fotografías de la corona del Sol, se podrán entender mejor cuestiones como por qué la atmósfera es mucho más calurosa que la superficie. La misión de siete años marca la primera visita de la humanidad a una estrella con implicaciones sobre el futuro de la Tierra y el Universo.