Al ser un volcán de los llamados escudo, el magma del kilauea es relativamente bajo en sílice, el elemento que vuelve más explosivos a los volcanes. El magma de este volcán tiene menos concentraciones de gas, por lo que se acumula menos presión dentro de él. Los especialistas consideran que el flujo de lava continuará, aún sin determinar un tiempo exacto, pero no se espera que el volcán pueda causar una destrucción masiva.