Más vale estar preparados

México forma parte del llamado Cinturón de Fuego del Pacífico, una extensísima franja en forma de herradura de más de 40 mil kilómetros ubicada en las costas del Pacífico, desde Nueva Zelanda hasta la costa oeste de Sudamérica. Esta línea concentra las zonas de subducción más importantes del mundo, donde sucede el choque entre las placas tectónicas que conforman la corteza terrestre.

Acumulación de energía

Científicos del Instituto de Geofísica (IGf) de la UNAM y de la Universidad de Kioto mantienen una red sismo-geodésica en el fondo oceánico, en la llamada “brecha sísmica”, que se extiende desde Acapulco hasta Papanoa. Esta red anfibia, denominada así por la ubicación de su instrumental en mar y tierra, mide tanto sismos como deformaciones lentas del continente.

Proyecto binacional

El proyecto ha colocado una serie de instrumentales científicos de alta precisión para recabar información específica y evaluar el peligro de grandes terremotos y tsunamis en el Pacífico mexicano. La investigación concentra sus esfuerzos en la brecha de Guerrero por la probabilidad, según registros históricos, de que allí suceda un sismo de magnitud igual o superior a 8.

Instrumentación de vanguardia