William Shakespeare, un homónimo del famoso escritor inglés, fue uno de los primeros en recibir la vacuna de Pfizer contra el Covid-19 en Inglaterra. El anciano de 81 años se mostró feliz por ser uno de los beneficiados. En varios países de todo el mundo ha dado inicio este nuevo reto de distribución y vacunación masiva donde cada gobierno ha determinado cuál será su organigrama de población prioritaria, que básicamente se centra en las personas de la tercera edad y los trabajadores de la salud son los primeros en la lista.

Las investigaciones sobre el impacto de las vacunas se mantienen. Recientemente, en un artículo publicado en la revista Nature, la firma de biotecnología Moderna informó que las personas que recibieron una de las primeras vacunas contra COVID-19 en los ensayos piloto todavía tenían niveles altos de anticuerpos potentes contra el coronavirus hasta cuatro meses después de su primera inyección. Los resultados muestran que la vacuna podría proporcionar una respuesta de anticuerpos "duradera", escriben los autores.

Con la llegada de las esperadas vacunas, la pandemia no finaliza. Los expertos llaman a la población a seguir manteniendo las medidas de sana distancia, pues para enfrentar el SARS-CoV-2 se considera que la inmunidad protectora tendría que cubrir hasta el 70 u 80% por ciento de la población. En el caso de México, se tendría que lograr inmunizar a 100 millones de personas, un objetivo aún bastante lejano que las autoridades parecen vislumbrar para finales de marzo del 2022.